Catalina de Aragón, la hija menor de los Reyes Católicos-----------------------------------------------------------------------------------------
A los tres años de edad, Catalina de Aragón es prometida al príncipe Arthur de Inglaterra, y es educada para convertirse
en princesa de Gales. Catalina se va adaptando poco a poco a la corte de los Tudor y a su vida como esposa. Pero cuando su esposo fallece, debe replantearse el futuro. La única salida que la convence es casarse con el hermano menor de Arthur, Harry. Y aunque tanto sus padres como su suegro se oponen a esta unión, Catalina ha heredado de su madre, Isabel la Católica, su indomable espíritu de lucha.
Lo sé, tengo claro que llevo mucho tiempo sin subir nada al blog, pero de verdad que estoy muy agobiada con las clases, en fin, la vida de estudiante es una mierda, pero que le vamos a hacer, en cuando puedo saco tiempo para subir contenido a mi blog, aunque lo cierto es que ya no tengo ni tiempo de leer, de hecho este libro lo terminé como hace un mes, y hasta ahora no he podido sentarme delante del ordenador, pero bueno, vamos a lo que nos interesa, que es la reseña del libro.
Creo que dentro de la monarquía inglesa, mi familia real preferida son los Tudor: Son inteligetes, astutos y han marcado un antes y un después en la monarquía inglesa: Enrique VII puso fin a la Guerra de las Dos Rosas, Enrique VIII fundó su propia iglesia, iglesia que sigue vigente en la mayoría de paises de habla inglesa, y por último, la gran Isabel I, llevó a inglaterra a su edad dorada y nunca ningún hombre pudo decirle lo que debía o no debía hacer..
Y después de este testamento, tengo que volver a repetir que soy republicana, que en el siglo XXI no tenemos falta de señores que chupen durante más tiempo del bote, pero que le vamos a hacer, la monarquía inglesa me sigue fascinando.
El libro trata de Catalina de Aragón, hija pequeña de los reyes católicos. Total que esta mujer no me cae bien, y eso que nunca me he tomado un café con ella, pero bueno, cada persona le tiene mania a lo que le da la gana. Total, que Catalina de Aragón no es de mi agrado, ni ella, ni su madre, ni la loca de su hermana Juanna y aún menos su hija, a la que llamaban Maria la sangrienta, que por algo seria... La cuestión es que esta familia no estaba muy bien del coco, tanto fervor religioso y tanto luchar contra los infilies y salvar las almas de los pobres indigenas del nuevo mundo les estaba recalentando los sesos demasiado.
Y aunque no haya parado de soltar sapos y culebras por la boca, el libro en si me ha gustado, no tanto como la Reina Blanca, porque ese libro es lo más, pero si me ha gustado, aunque considero que podrían haberlo hecho un poco más salseante, en ciertas ocasiones era bastante soso y repetitivo.
En conclusión: Deseo seguir leyendo libros de Philippa Gregory.
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